jueves, 29 de octubre de 2009

Motorland Aragón

Quién lo diría hace tan solo unos años que a finales de esta década Aragón contaría con un circuito de velocidad de primer orden internacional.
Pues bien, ese sueño se ha hecho realidad y existe en la localidad turolense de Alcañiz. No es un lugar cualquiera ni escogido al azar. Alcañiz albergó durante muchos años el mítico Circuito urbano de Guadalope por sus calles y, cómo no, retiene esa tradición y esa pasión por las carreras de automóviles que hacen de la capital del Bajo Aragón el lugar idóneo para estas instalaciones.


No se nos puede olvidar que el proyecto alberga no sólo un circuito de velocidad de más de 5 kilómetros adaptado a las exigencias FIA para optar a cualquier campeonato, si no que además ha sido diseñado por el último gurú de los circuitos de F1: Hermann Tilke. A su lado ha estado como asesor Pedro Martínez de la Rosa, hasta la fecha probador de McLaren Mercedes y grandísimo piloto de Fórmula 1. También cabe recordar que dentro del complejo bautizado como Motorland Aragón, conviven una pista de karts con capacidad de albergar meetings internacionales y un circuito de tierra donde organizar competiciones de motocross y autocross entre otras.


En un futuro próximo, Motorland crecerá con un parque industrial enfocado hacia la I+D del sector del automóvil, dando así vida y rentabilidad a tan magna inversión. Loable es buscar que vaya más allá de las actividades estrictametne deportivas para las que sirve un circuito. Buscar la excelencia y la convivencia de distintas facetas del mundo del automóvil es un acierto.

El pasado fin de semana Alcañiz vibró con la puesta de largo internacional de este macroproyecto acogiendo las World Series by Renault. Un evento que dejó patente la calidad de la instalación y dió esperanzadoras muestras de lo que un día puede llegar a ser.

Se ha escrito mucho en los medios regionales acerca de esta inauguración resaltando los muchos detalles buenos que se han visto y aceptando los problemas lógicos que han podido surgir. Pero más allá de ello sería interesante considerar la posibilidades que se abren. No sería lo correcto darse por satisfechos.


De entrada, el Gobierno de Aragón debe ponerse las pilas rápidamente para asegurar unos buenos accesos al circuito y vías rápides que faciliten la llegada a Alcañiz. Buena idea sería construir un apeadero de tren dentro de las instalaciones de Motorland, saldría desde Zaragoza los días de eventos con lo que ello conlleva. Desaparecerían coches de la carretera y la llegada y salida sería mucho más comoda evitando el colapso automovilístico. Pese a eso urge el desdoblamiento de la N-240 así como la contrucción de una vía rápida hasta Alcañiz.

Deportivamente hablando, la organización del circuito debería aspirar a todo. Desde copas monomarca, pasando por los eventos Renault y planteándose retos como acercar a Aragón el WTCC, MotoGP y quién sabe si en un futuro la F1. Moverse y atraer cualquier espectáculo de interés, a fin de cuentas.


No estamos hablando sólo de un circuito, estamos hablando del dinamizador de toda una comarca y de el que debería ser centro neurálgico de cualquier aficionado aragonés a las carreras.

Pensemos pues, que esto no ha sido más que el comienzo de algo grande. De un lugar que nos va a llenar de satisfacción a los amantes del motor. Ilusionémonos en esta región que entiende y exige. Y hagamos entre todos con nuestro apoyo de este nuevo circuito un referente.


P.D.: Para gustos colores... y para el mío, debería llamarse Circuito de Alcañiz o Circuito de Guadalope, respetando la tradición.

No hay comentarios: